Mientras caía una intensa lluvia aquella noche de marzo, Max Miller el encargado y jardinero del Palacio Real vió una extraña silueta en el laberinto del jardín. Pensó que era un animal y no le dió importancia hasta hoy. – Le decía un agente al oficial de detectives Karl, mientras éste contemplaba con asombro los 2 kilómetros de frondoso y majestuoso jardín.
Esta mañana, alguien a irrumpido en el Palacio Ruso y se ha llevado de la caja fuerte varios huevos de Fabergé. La alarma no ha sonado y la cámara de seguridad muestra algo muy curioso. A las 8:30 Luis Villan el hijo de la reina, entra en el salón con su bandeja del desayuno y su pipa de brezo como hacía siempre. A los cinco minutos hace acto de presencia Max Miller pidiendo que lo acompañe fuera para atender a un conde que venía de visita. En los siguientes diez minutos nadie entra o sale del salón dónde se encuentra la caja fuerte oculta detrás de un cuadro. Sin embargo, se puede apreciar una especie de reflejos que recorren el lugar fantasmagóricamente y como el cuadro se desprende de la pared violentamente saliendo por una ventana entreabierta.
– ¿El conde estaba citado a esa hora? – preguntó Karl inquisitivamente.
Si señor, el Conde Von Lemacks llegó a la hora convenida para hablar con la reina y su hijo sobre negocios. Tenía en mente comprar una valiosa colección de pinturas que habían pertenecido a la familia Villan desde hacía generaciones.
– Me gustaría hablar con todos los que estaban en Palacio esta mañana. – enunció el detective.
Un hombre de complexión delgada y piel oscura, de ojos saltones y ataviado con un traje elegante y algo sucio se acercó a Karl y al agente nerviosamente. – Mi nombre es Esteban Rico y soy el amo de llaves, esta mañana estuve en el piso de arriba todo el tiempo. Me tocaba quitar el polvo de la sala de juegos y de ahí no me moví. –
– ¿Vió u oyó algo Sr. Esteban? – preguntó el agente.
Pues si la verdad, la sala dónde yo me encontraba estaba abierta y tiene una ventana que dá a la parte trasera del laberinto del jardín. Hay un pequeño puente de madera y escuché pasos apresurados, como si alguien estuviera corriendo. Cuando me asomé a ver, pude ver una sombra o una persona vestida de color negro, no sabría decir. Serían como las 8:45 cuando sucedió eso. Muestras gratis y regalos
– El conde Von Lemacks tenía una presencia exquisita y refinada. Portaba una maleta grande llena de oro y joyas que pensaba entregar a la reina a cambio de la colección de pinturas. Según su declaración, estuvo hablando con Luis durante cinco minutos en la puerta principal de palacio. Luego fué a la habitación de la reina acompañado por el hijo de ésta y se quedó allí conversando hasta que nosotros llegamos. – Leyó en voz alta el agente del bloc de notas que portaba.
– ¿Dónde fué usted Max luego de que Luis y Lemacks estuvieran charlando? – preguntó Karl con una sonrisa maliciosa
El jardinero tragó saliva y pensó unos instantes hasta que por fin murmuró algo.
– Yo, pues fuí a seguir con mi tarea, me quedé en la zona delantera de Palacio recortando unos arbustos y barriendo un poco. La tormenta de anoche dejó sin electricidad la zona durante un rato, y todas las malas hierbas y las ramas se acumularon aquí con el viento. Afortunadamente esta mañana luce un sol espléndido. Nadie puede ratificar mi coartada porque todos estaban ocupados. –
– En efecto, – Interrumpió Luis con rostro enfadado.
– Yo subí a mi habitación a descansar un rato mientras Lemacks y mi madre debatían las condiciones de su particular negocio. –
– A todo esto hay una duda que flota en el ambiente, ¿quien nos avisó? – dijo Karl…
Fué el vigilante de seguridad que controla las cámaras desde una casita a 3 kilómetros al sur de aquí, cuando vió las sombras sospechosas y el cuadro desprenderse y desaparecer. En el salón hemos hayado la caja fuerte sin abrir pero con la combinación ya desbloqueda, una huella de barro y hojas cerca de la ventana, y marcas de líneas en el alfeizar.
Un fantasma muy inteligente, o muy tonto si piensa que no sabemos como es la plata.
(1) ¿Quién robó los huevos?
(2) ¿Qué pista señala al culpable?
(3) ¿Cómo lo hizo?
El fantasma del laberinto. Acertijo policiaco
Mientras caía una intensa lluvia aquella noche de marzo, Max Miller el encargado y jardinero del Palacio Real vió una extraña silueta en el laberinto del ja
meganicho
es
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2024-11-30
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